El pregonero de la verdad y la justicia, algo más que un oficio .
- Un reto en la época actual
- Un peligro para el hipócrita
- Una luz para el ciego
Por Óscar Báez Montes
Hablar de los pregoneros de la verdad y la justicia, es hacer referencia en algo más que un simple anunciador de noticias, edictos, impuestos y deseos de gobernantes en forma pública.
Los pregoneros liberales mantienen guardados en su memoria el acontecer y actuar del ser humano cada día, y permanecen como un vínculo entre el pasado y el presente.
Aquí nadie escapa del juicio de la historia, ya que si no conocemos el pasado, tenemos el peligro de repetir los mismos errores.
Nuestros héroes, así como las mujeres y los hombres de buenas costumbres, que aportaron y lucharon por tener lo que hoy gozamos , merecen todo nuestro respeto y reconocimiento.
El pregonero es humilde, prudente y representa la voz en mente colectiva, guarda celosamente la información y la usa en el momento indicado y con las personas indicadas .
Si bien, no vive de la caridad pública, sobrevive de lo que representa para todos vivir de la verdad y la justicia, donde sus pasos, su tiempo y su voz, están valorados sobre cualquier precio de moneda alguna .
Aunque la academia describe al pregonero en la época medieval y de la colonia, nuestros antepasados de la raza de bronce contaban con la mejor red de mensajeros y pregoneros.
En los tiempos de nuestro Presidente Benito Juárez, muchos dieron su vida con valentía y honor, descubriendo a los hipócritas y a los usurpadores.
Valia lo mismo una mazorca de maiz de un campesino, que el oro de algún poderoso liberal, para que el pregonero cumpliera su misión de recorrer territorios dando a conocer la verdad y la justicia.
Hoy en día, después de una época nefasta, que una minoría se apoderó de las comunicaciones, los pregoneros subsistieron de pueblo en pueblo, viviendo en la medianía y el acecho constante de una élite que traicionó a la nación, saqueando las riquezas del país al extranjero, dejando en la pobreza a millones de mexicanos.
Por todo lo anterior, respetable lector, puedo decir que el título de pregonero de la verdad y justicia está en usted, al momento que su pensar se ilumina después de una ceguera existente.
Bueno, es mi opinión y la dejo a su sano criterio .
Saludos .