
La Presidenta, ¿hackeada?
Salvador Garcia Soto
La noticia corrió como reguero de pólvora en los medios y redes sociales en México, luego de que el diario The New York Times publicara el domingo un artículo en el que asegura, citando fuentes “familiarizadas con el asunto”, que el teléfono celular que utiliza la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, habría sido hackeado el pasado 27 de febrero, justo después de la llamada telefónica que sostuvo con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para comentar la entrega de 29 capos del narcotráfico mexicanos que fueron entregados en extradición al Gobierno estadounidense.
El influyente diario neoyorquino afirma que el hackeo al celular de la mandataria de México ocurrió poco después de que se concretó la entrega de los 29 criminales al Departamento de Justicia y aunque no da mayores detalles, el mismo medio dice haber consultado a “un portavoz de la Presidencia mexicana” que declinó hacer comentarios al respecto.
Ante la gravedad de los señalamientos del NYT y lo que implicaría que hayan robado información personal y confidencial de su teléfono celular, a la presidenta Claudia Sheinbaum le preguntaron ayer los periodistas que cubren sus giras de fin de semana, sobre si su móvil había sido hackeado. “¿Le hackearon el celular?”, le lanzaron los reporteros a la mandataria mientras se subía a su camioneta tras la supervisión de un tramo de la autopista Villahermosa-Chetumal. “Ya el lunes, el lunes”, contestó. “New York Times dice que le hackearon su teléfono”, le insistieron, pero ella, tratando de minimizar el tema, volvió a decir: “El lunes hablamos de eso”.
En el mismo artículo del Times, se consigna que “según fuentes cercanas a Trump”, el presidente estadounidense habría elogiado a Sheinbaum durante aquella llamada telefónica del 27 de febrero, al decirle en señal de respeto: “Eres dura”. El diario neoyorquino califica la entrega masiva de capos, que incluyeron personajes como Rafael Caro Quintero y los hermanos Treviño Morales, líderes de los Zetas, como una de las medidas más “audaces” de la doctora contra los cárteles mexicanos “y quizás la más drástica. Fue un golpe colosal para los grupos delictivos organizados y envió el mensaje de que Sheinbaum se tomaba en serio la lucha contra ellos”, dice el artículo.
A reserva de lo que informe hoy la Presidenta mexicana en su conferencia matutina, sobre si ocurrió o no el hackeo de su celular, con todas las implicaciones que ese hecho tendría, ayer el artículo del NYT terminó siendo un reconocimiento a la estrategia de la doctora y su gobierno para enfrentar las amenazas arancelarias de Donald Trump, pues según su análisis, “la presencia serena, junto con los resultados obtenidos en migración y tráfico de fentanilo, parecen haberle ganado el respeto de Trump” que ha elogiado no sólo la campaña mexicana de prevención para el consumo del fentanilo, sino que le ha dedicado expresiones como “mujer maravillosa”, “muy inteligente” y con quien dice tener “una relación muy buena”.
Ese “respeto” que menciona el artículo del diario habría sido la causa por la que Trump aceptó la propuesta de la Presidenta de México para posponer la entrada en vigor de los aranceles generales a productos mexicanos, del 4 de marzo, como había anunciado la Casa Blanca, al próximo 2 de abril, algo que le ha comprado tiempo al Gobierno de México para tratar de lograr que el agresivo presidente de Estados Unidos excluya a México de sus aranceles, a partir de que tenemos un tratado comercial vital para los dos países y de que nuestro país no le ha impuesto ningún arancel a las importaciones estadounidenses, por lo que no aplica para lo que Trump ha llamado los “aranceles recíprocos”.
Veremos si los elogios y el “respeto” que están viendo desde la prensa estadounidense hacia la Presidenta mexicana, alcanzan para evitar los aranceles o si, con todo y todo, Trump disparará su escopeta arancelaria en contra de México. Por lo pronto antes tendremos que saber si le hackearon o no el celular a la doctora Sheinbaum y ¿quién pudo haber hecho tan osada acción?… Giran los dados. Doble Escalera en este puente para los lectores.