Entre Veredas
Marco Antonio Lizárraga
“Bienaventurados los que no tienen nada que decir, y que resisten la tentación de decirlo”, James Russell Lowell
Simple o sencillo
EL RETO
En un contexto de creciente violencia e incertidumbre, los legisladores federales del Grupo Parlamentario de Morena provenientes de los estados de Baja California, Baja California Sur, Sonora y Sinaloa, encabezados por Ricardo Monreal Ávila, expresaron un rotundo respaldo al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya.
En su intervención, Monreal no solo ratificó el compromiso de su bancada con la recuperación de la tranquilidad en Sinaloa, sino que también destacó la figura de Rocha como un hombre con una profunda calidad moral y un historial de lucha por la democracia en México.
Este gesto de solidaridad, marcado por la presencia del presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, responde a la necesidad de fortalecer la unión política entre los diferentes niveles de gobierno para enfrentar la crisis de seguridad que atraviesa la entidad.
La reunión en Culiacán, lejos de ser un acto meramente protocolario, se presenta como una clara declaración de apoyo a un proyecto gubernamental que busca recuperar el orden y el desarrollo para Sinaloa, un estado que, aunque ha enfrentado grandes retos, parece decidido a avanzar en su proceso de pacificación.
Ricardo Monreal destacó las cualidades personales y políticas de Rubén Rocha Moya, calificándolo como un “hombre de Estado”, y subrayó su congruencia con los valores de la izquierda mexicana.
Para Monreal, el gobernador es una figura que, a pesar de los ataques externos y los obstáculos inherentes a su labor, ha mantenido la firmeza necesaria para seguir adelante con su mandato.
Este reconocimiento no solo refuerza la posición de Rocha dentro de la política nacional, sino que también lo coloca como un líder que no se deja doblegar por las adversidades, un mensaje clave para el pueblo sinaloense que sigue de cerca el rumbo del estado.
La seguridad sigue siendo el tema central en la agenda pública de Sinaloa. El propio gobernador Rocha agradeció el respaldo de los legisladores, resaltando el apoyo de las fuerzas federales de seguridad en la lucha contra la violencia.
Este reconocimiento subraya la importancia de la colaboración entre los gobiernos estatal y federal, especialmente en un contexto donde la violencia organizada ha marcado la pauta de las noticias locales.
La estrategia de seguridad del gobierno de Rocha incluye la integración de las fuerzas federales para hacer frente a la violencia, un modelo de intervención que no solo es necesario, sino urgente ante la magnitud del problema.
No obstante, el gobernador también reconoció los avances en la recuperación de la tranquilidad en Sinaloa, aunque enfatizó que los retos persisten, como se reflejó en el reciente atentado en el fraccionamiento Los Ángeles, que lamentablemente resultó en víctimas mortales.
Este tipo de incidentes, que afectan directamente a la población civil, son los que mantienen la desconfianza en las instituciones locales y federales, aunque el apoyo del gobierno estatal y federal a las víctimas se presenta como un intento de mitigar el dolor y la angustia de las familias afectadas.
Uno de los aspectos más relevantes de este respaldo es la consolidación de la unidad política en tiempos de adversidad.
El respaldo unánime de los legisladores federales, liderados por Monreal, refuerza la necesidad de colaboración entre los distintos niveles de gobierno para hacer frente a los desafíos de seguridad que enfrenta Sinaloa.
Sin embargo, también se reconoce que la unidad política debe ir más allá de los discursos y debe reflejarse en políticas públicas coherentes, que incluyan no solo medidas de seguridad, sino también acciones concretas para mejorar la calidad de vida de los sinaloenses, especialmente en las áreas más vulnerables.
El respaldo expresado por los legisladores federales a Rubén Rocha Moya, acompañado de un mensaje de unidad política, envía una señal importante de que la recuperación de la tranquilidad en Sinaloa es una tarea de todos.
El gobernador, por su parte, tiene claro que, aunque los avances son positivos, los problemas de seguridad son complejos y requieren de una acción firme y coordinada entre los diferentes niveles de gobierno.
La clave para avanzar en la pacificación de Sinaloa radica en la capacidad del gobierno estatal para implementar una estrategia integral de seguridad que no solo dependa de las fuerzas federales, sino que también contemple un fortalecimiento de las instituciones locales, la promoción de la cohesión social y el combate a las desigualdades que alimentan la violencia.
Si el gobierno de Rubén Rocha Moya continúa con este enfoque de colaboración y firmeza, y si los legisladores federales siguen respaldando sus esfuerzos, es posible que Sinaloa encuentre el camino hacia la paz y el desarrollo que tanto necesita.

SIN SABORES
La comparecencia del Secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Óscar Rentería Schazarino, ante el Congreso del Estado fue un espacio clave para reafirmar el compromiso de la administración estatal y la Legislatura en la construcción de soluciones frente a la creciente crisis de seguridad en el estado.
En este contexto, la coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena, diputada María Teresa Guerra Ochoa, destacó varios puntos esenciales que marcan el rumbo de las acciones legislativas y gubernamentales en materia de seguridad, mientras reafirmaba el respaldo a la estrategia de Rentería Schazarino.
Guerra Ochoa subrayó la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas como fundamentos esenciales para fortalecer tanto la democracia como la seguridad en Sinaloa.
Este enfoque es clave, pues en un contexto donde la inseguridad ha dejado una huella profunda en la sociedad, la confianza en las instituciones de seguridad se torna indispensable.
La legisladora de Morena no solo destacó la situación compleja que atraviesa el estado, sino que también hizo un llamado a la unidad de esfuerzos entre los distintos niveles de gobierno.
Aquí, la diputada reconoció que los problemas de seguridad deben ser abordados con una visión integral, que no solo apunte a la represión del crimen, sino también a las causas subyacentes como la desigualdad social.
Guerra Ochoa presentó un enfoque multifacético para resolver los problemas de seguridad, subrayando que el fortalecimiento de la educación, la cultura y el deporte son factores determinantes para disminuir las brechas sociales que a menudo terminan siendo caldo de cultivo para la delincuencia.
Este enfoque se presenta como un cambio de paradigma, al integrar el desarrollo humano como una herramienta fundamental para una política de seguridad duradera.
A este enfoque se suma la propuesta de la creación de una unidad de investigación e inteligencia dentro de la Secretaría de Seguridad Pública, que refuerza el mensaje de que la seguridad no solo debe ser preventiva, sino también proactiva y estratégica.
Un tema que destacó en la comparecencia fue la visión del Secretario de Seguridad, Óscar Rentería Schazarino, quien puso énfasis en la dignificación de la policía como eje central de su gestión.
Rentería presentó una propuesta integral que incluye el mejoramiento de las condiciones laborales de los elementos policiales, como el acceso a vivienda, seguros de vida y la creación de un servicio profesional de carrera.
En este sentido, la dignificación de los cuerpos policiales se presenta como un requisito fundamental no solo para atraer a personas comprometidas con la seguridad, sino también para mantener motivados y capacitados a los elementos que ya forman parte de las corporaciones.
Esta visión humaniza la función policial y refuerza la necesidad de generar una policía con identidad, profesionalismo y eficacia.
La bancada de Morena no solo expresó su respaldo a las propuestas de Rentería Schazarino, sino que también presentó propuestas concretas como la mejora en el equipamiento de las corporaciones policiales y el fortalecimiento de la presencia femenina en los mandos de las fuerzas de seguridad.
La inclusión de mujeres en cargos de liderazgo dentro de la policía responde a una necesidad de equilibrio, profesionalización y respeto por la diversidad en los cuerpos de seguridad, un aspecto que ha sido desatendido en muchas ocasiones.
Además, la disposición para trabajar de manera conjunta con el gobierno estatal, encabezado por el doctor Rubén Rocha Moya, y el gobierno federal es una señal de que los esfuerzos por mejorar la seguridad en Sinaloa no se limitan a una sola esfera de gobierno, sino que buscan una colaboración efectiva a nivel local, estatal y federal.
La comparecencia de Óscar Rentería Schazarino y la intervención de la diputada María Teresa Guerra Ochoa reflejan el compromiso por parte del gobierno estatal y la Legislatura de abordar los problemas de seguridad de manera integral.
A través de la profesionalización de los cuerpos policiales, el fortalecimiento de la transparencia y la rendición de cuentas, y la promoción de una visión más amplia que considere el desarrollo social como una estrategia para prevenir el crimen, Sinaloa busca avanzar hacia un modelo de seguridad más efectivo y humano.
Este análisis pone de manifiesto que, aunque los retos son grandes, la unidad de esfuerzos y la adopción de una visión estratégica, sumada al respaldo unánime de las fracciones parlamentarias, podrían sentar las bases para una mejora sustancial en la seguridad del estado.
La seguridad es, sin duda, una tarea que requiere de compromiso, visión y cooperación entre todos los actores políticos y sociales, pues solo con una respuesta integral y coordinada se podrán superar los complejos desafíos que enfrenta Sinaloa.
AL OJO DEL AMO
Es preocupante que Mariano Ortega, líder de los pulmoneros de Mazatlán, insista en comparar la situación de su gremio con la de los empresarios y comerciantes gravemente afectados por la crisis económica y la inseguridad que azota la región.
Esta actitud de “ver burro y antojarse carga” refleja un oportunismo carente de fundamento y desvirtúa el objetivo de los apoyos gubernamentales diseñados para los sectores más vulnerables.
Mazatlán enfrenta una disminución en el turismo debido a la inseguridad, lo que ha generado mermas considerables para empresarios que dependen directamente de este flujo.
En contraste, aunque los pulmoneros han visto reducido el número de turistas, cuentan con una alternativa que les ha permitido seguir trabajando: los ciudadanos locales que diariamente utilizan sus servicios como transporte alternativo.
Esta ventaja no es algo que compartan muchos comerciantes que han tenido que lidiar con robos, extorsiones y pérdidas económicas severas.
El apoyo de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) está diseñado para salvar negocios al borde del colapso, no para sectores que aún cuentan con ingresos, aunque sean menores a los acostumbrados.
En lugar de exigir recursos que no les corresponden, Ortega debería replantear la dirección del gremio y buscar soluciones sostenibles que realmente promuevan el bienestar de su agrupación.
En estos tiempos, sería pertinente que el frente transportista se planteara la posibilidad de renovar su dirigencia, buscando líderes con un criterio amplio y una visión estratégica que les permita identificar y detonar verdaderas áreas de oportunidad para el sector.
De esta manera, podrían enfocarse en generar beneficios reales y sostenibles para sus agremiados, dejando de lado el protagonismo y los proyectos políticos de corto o largo plazo que solo afectan la unidad y el propósito del gremio.
Mazatlán necesita líderes responsables y comprometidos con el bienestar colectivo, no con intereses personales o demandas infundadas que entorpecen la recuperación económica de la ciudad.

ENE 23 2025

Por elpiripituchi

Fundador y Creador del Sitio