Columna

Agenda Política

Solidaridad de senadores
Y diputados federales en
Torno al gobernador Rocha

= En encuentro efectuado en la ciudad de México
= Todo el apoyo de la federación, dice Rosa Icela
= Ya se mueven los de la renovación de mandato
= Proceso, tras tres años de gobierno de Rubén Rocha

Jorge Luis Telles Salazar

Por separado y en el ámbito de sus respectivos recintos parlamentarios, senadores de la República y diputados federales, simpatizantes de la Cuarta Transformación, patentizaron su solidaridad, reconocimiento y respaldo al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya en su tarea por propiciar el regreso de la tranquilidad y la seguridad ciudadana a nuestra entidad.
Rocha Moya realizó un rápido viaje a la ciudad de México, a fin de llevar a cabo gestiones propias de su investidura, relacionadas o no con las circunstancias imperantes en la entidad. Además de su encuentro con los legisladores de la 4T de ambas cámaras, también se reunió con la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.
-No descansaremos; estamos metidos, de lleno, en el trabajo que nos corresponde realizar, que es la armonización de esfuerzos en la tarea de otorgarle a las familias sinaloenses la seguridad que merecen – acoto, al respecto, el titular del Poder Ejecutivo en el Estado.
En su reunión con los legisladores, tanto el senador Sergio Gutiérrez como el diputado federal Ricardo Monreal Ávila -presidentes de una y otra cámara, respectivamente – coincidieron plenamente en la necesidad de apoyar a Sinaloa para librarlo de cualquier dificultad en el tema de la seguridad y para construir, junto con el gobernador, “un estado próspero, a través de su desarrollo económico, el trabajo en salud y en todos los ámbitos de la vida productiva y social de la entidad”.
Un buen respaldo para Rocha y una clara muestra de solidaridad para el gobernador en estos que son, sin duda, los días más difíciles de su mandato gubernamental.
Pendientes.
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Y bueno.
En el mismo sentido, la reunión con Rosa Icela Rodríguez, la secretaria de Gobernación. La mano derecha de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La capitana del gabinete de la doctora Sheinbaum Pardo estableció el compromiso de mantener, como hasta ahora, un trabajo conjunto no solo en materia de seguridad sino en todos los temas que Sinaloa requiera del apoyo de la Federación.
Particularmente, la titular de la SeGob expresó, textualmente, sus deseos de que el Estado retome sus actividades ordinarias y ratificó su disposición para avanzar gradualmente en el cumplimiento de las metas trazadas, siempre tomados de la mano, gobierno de la República y gobierno estatal.
En eso, precisamente, se concentró la agenda con Rosa Icela Rodríguez: en la necesidad de normalizar todo tipo de actividades en Sinaloa; en la reactivación de la economía y en la creación de un clima de tranquilidad en la entidad.
Hasta la fecha, la situación todavía mantiene su estatus de “complicada”.
Y si lo es, aún.
Sin embargo, hay presencia de síntomas alentadores en los últimos días, cuya principal manifestación es la movilidad de la ciudad, que ya alcanza buenos niveles, sin que esto quiera decir, ni mucho menos, que el problema esté resuelto. Por supuesto que no.
Hacia allá queremos caminar, de cualquier modo.
Ojalá y sí.
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Por otro lado.
El primer día de noviembre, Rubén Rocha Moya cumplirá tres años como gobernador constitucional de nuestro Estado y a partir de ese día, justamente, comenzará el proceso para una eventual revocación de mandato si lo consideran conveniente los ciudadanos de la entidad.
Hay que puntualizar que la revocación de mandato es un tema que se incluyó en la Constitución Política del Estado, justamente a demanda del gobernador actual, Rubén Rocha, estimulado por la importancia de este proceso en el ramo federal.
Revocar mandato es tanto como llevar a cabo una elección constitucional, organizada por el Instituto Electoral del Estado de Sinaloa.
El plazo para ello es tres meses después de concluido el mandato gubernamental; o sea, el último domingo de enero o el primero de febrero, según lo decida la autoridad electoral. Para esto, se trata de un proceso que debe contar, cuando menos, con la aprobación del 10 por ciento de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral de Sinaloa; o sea, de poco más de 200 mil, por lo bajito.
Y si el proceso se lleva a cabo se requiera de una participación del 40 por ciento del padrón, para efectos vinculantes.
Así lo dice la ley.
Así está en la Constitución Política del Estado, bajo el impulso del gobernador actual.
Ya se advierte un movimiento de esta naturaleza, a poco menos de una semana de que Rocha cumpla con su tercer año de ejercicio constitucional. Deberá llenar los requisitos aquí señalados, si no, no el resultado será inaplicable en su finalidad.
¿Qué os parece amigo lector?
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Y hasta aquí por hoy. Nos vamos ya. Cuídense mucho y Dios los bendiga. Ahora y siempre.